«El fútbol de aquel Barça tenía mucho que ver con la Holanda de Rinus Michels de los años 70«.

Ésa fue la frase que Johan Cruyff dirigió a sus pupilos en los vestuarios del estadio de Wembley en los momentos previos a la final de la Copa de Europa de 1992, una frase que define la filosofía de juego del holandés. Ganando y dando espectáculo futbolístico, con su fútbol atrajo a muchos seguidores con un estilo entretenido y a la vez efectivo. La década de los 90 está marcada por este equipo, con cuatro Ligas consecutivas, y tuvo su punto máximo con la Copa de Europa de 1992. El juego desplegado por este Barcelona tenía mucho que ver con la Holanda de los 70 de Rinus Michels, lo que llamaban el fútbol total: circulación rápida de balón, con constantes cambios de posición, que daba como resultado un fútbol muy dinámico. El llamado «Dream Team» tenía una mezcla de jugadores nacionales de calidad, como Zubizarreta, Julio Salinas, Beguiristáin, Bakero, Guardiola, Ferrer, Amor o Nadal, que se unían a un grupo de extranjeros que resultaban decisivos, Michael Laudrup, Hristo Stoichkov, Ronald Koeman y el brasileño Romario, distribuyéndose en un 3-4-3, donde destacaba la figura del líbero, la del organizador y la presencia de extremos. Pero esta época gloriosa de fútbol y títulos tenía fecha de caducidad, y fue el día que el ACMilan gana al Barça por 4-0 en la final de Atenas en 1994. Ahí concluyó el ciclo de todo un equipo de leyenda, en el que tuvo especial importancia la figura de su entrenador, Johan Cruyff. Gracias a la filosofía del «salid y disfrutad», el FCBarcelona escribió una de las páginas más doradas de su historia, convirtiéndose en todo un referente del fútbol mundial.
Firma: Marcelo Torres.